sábado, 25 de junio de 2011

Madre mía, por no decir: aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah.
Lo sabía, sabía que ocurriría el desastre. El verano me altera, al menos todos los veranos que son impares (2011) Ha sido todo un poco demasiado rápido, como habréis observado llevo sin actualizar el blog desde hace un poco de tiempo, tiempo que ha sido una locura, un denigre de los de antaño pero multiplicado por 1000. Lo que había hablado con L... todo más peligroso.

No me acuerdo como me sienta el agua, hace demasiado tiempo que no la bebo, y me alimento a base de cigarrillos, mucho alcohol, chocolate y demás. Me duele la cabeza y la boca me sabe raro, me asusté mucho y me sorprendí a mí misma corriendo para un lado y para otro con tacones y luz horrible. En fin, volvemos a empezar, probando lenguas con piercings en situaciones un tanto extrañas, siendo atracadas sin darnos cuenta, corriendo con ojos pintados, llenos de arena o no, gente sin mechero y malas palabras, algún que otro: ¿QUÉ? y demasiados cubatas en el pelo. Lo sabía. No quiero pensar en julio.

Las seis de la mañana se convirtieron en mi despertador, y siempre me avisa el sol y la A. de que me estoy pasando, ¿Pero que voy a hacer? No tengo nada que perder ni nada que ganar, solo voy huyendo de los espejos para no videarme el pelo bicolor y mirando "raves" con ojos de: Rave no, ¡RABA! Escupir por balcones y fumar como si no hubiera un mañana ya que probablemente no lo haya y nos sorprendamos con alguien muerto como el señor Hendrix.

Desvaríos de demasiadas horas sin dormir, aseos ilegales ahumados, Taxi Driver pero con coletas y algún que otra hoguera interna en las noches cortas, en las noches que acaban cuando una decide, nada nos para, en verano no se utilizan medias, así que no debemos tener miedo a romperlas, la piel regenera.

Jimi Hendrix - Hey Joe

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